Aunque no lo parezca, así lo denota una investigación. Las personas materialistas tienden a deprimirse, según el estudio de la Universidad de Baylor, en Estados Unidos.
Las personas que más se preocupan por su físico, su apariencia, llevar la última moda, las marcas más caras o el último modelo de ordenador o teléfono móvil, son las que más se deprimen.
En el estudio participaron 246 personas con una media de edad de 21 años, a las que se pidió que realizaran una encuesta para medir su grado de materialismo y satisfacción con la vida que llevaban.
Tras el estudio, los investigadores estadounidenses concluyeron que los que habían tenido un resultado bajo en gratitud y alto en satisfacción de sus necesidades eran los más propensos a ser materialistas. Estas personas se encuentran constantemente insatisfechas por no poder cumplir sus deseos, por lo que son infelices con su vida. Siempre necesitan algo nuevo, y comprar una vez les lleva a seguir comprando.
En el lado contrario se encuentran las personas que obtuvieron altos resultados en gratitud, para los que lo importante son los seres que les rodean y su relación con ellos.
