La NASA desviará un asteroide
¿Qué pasaría si un asteroide se desviara en el billar cósmico, dirigiéndose luego a la Tierra? La NASA se hizo esa pregunta hace mucho. Existen planes que por ahora son solamente teóricos. Pero como tú sabes, querido lector, siempre es mejor realizar ensayos para enfrentar mejor estos pequeños eventos. En este caso, una catástrofe planetaria. Por eso, la NASA desviará un asteroide, para probar el funcionamiento de su plan de emergencia.
Se trata de la misión DART (Double Asteroide Redirection Test). Estrellará una nave en el asteroide más pequeño de un sistema binario. Será fácil medir cualquier cambio en la órbita del objeto más pequeño desde la Tierra. Y será un buen indicador de si lo han desviado con éxito.
Buscando a los asesinos
«DART será una demostración extraordinaria», afirma Ed Lu, astronauta jubilado de la NASA. Es fundador de la B612 Foundation, dedicada a la detección y el desvío de asteroides.
El primer paso para detener un asteroide asesino es encontrarlo. «Hay literalmente cientos de miles de asteroides ahí fuera», afirma Lindley Johnson. Es oficial de defensa planetaria de la NASA. Hay 2078 asteroides potencialmente peligrosos en el catálogo.
La NASA clasifica cualquier objeto mayor a 140 metros de ancho que pase a ocho millones de kilómetros como potencialmente peligroso. En siete años, el asteroide 1990MU (tres kilómetros de ancho) pasará a cinco millones de kilómetros de la Tierra. «No queremos que impacte algo tan grande», afirma Johnson. «Nuestra tarea principal es encontrarlos. Y completar el catálogo de todo lo que hay allá».
Asteroides de un kilómetro o más provocarían devastación en todo un continente. Provocarían un enfriamiento drástico y la posibilidad de malas cosechas durante años.
Incluso las rocas espaciales de menos de 150 metros de ancho pueden ser extremadamente peligrosas. Algunos meteoros explotan en el cielo con la fuerza de bombas nucleares. Como el de Cheliábinsk, Rusia, en 2013. Nadie lo vio venir.
La prevención es la clave
Con años o incluso décadas para prepararnos, podríamos desviar de su rumbo asteroides grandes. La misión DART estrellará una nave de media tonelada en un asteroide. En octubre de 2022 la nave del tamaño de una nevera se acercará a un asteroide de 800 metros de ancho. Se llama Didymos y es orbitado por una luna de unos 150 metros de ancho. Esa luna será impactada. Si logran modificar su órbita, será un éxito.
Los impactadores cinéticos podrían lograr redirigir un asteroide pequeño como ese. Pero ¿y si es grande? Lu señala que si un objeto tan grande estuviera en trayectoria de colisión con la Tierra, necesitaríamos una estrategia mayor. Como detonar una bomba nuclear cerca del asteroide para vaporizar parte de su superficie y desviarlo de su rumbo. Pero podría emitir una ráfaga de fragmentos hacia la Tierra.
La estrategia de desvío óptima depende tanto del objeto entrante como del tiempo con el que contemos antes del impacto. Por eso la NASA desviará un asteroide: para saber si funciona, hay que practicar. Un poco de preparación supone una diferencia considerable.