La más grande erupción solar jamás vista
Es una imagen colosal. Fue divulgada esta semana por la Agencia Espacial Europea (ESA). Uno de los instrumentos de la nave espacial Solar Orbiter la captó. Se trata de una misión conjunta de la ESA y la NASA. Y es la más grande erupción solar jamás vista.
Tormentas solares
La imagen capta lo que se conoce una erupción de protuberancia solar. Lo explica Del Toro Iniesta, uno de los investigadores principales de la misión Solar. «Las protuberancias solares suelen erupcionar expulsando material solar. Eventualmente ese material llega a la Tierra».
«Son zonas del Sol más densas y frías que los alrededores. Se suspenden en la superficie por el campo magnético. Pero cuando este se perturba, el gas sale expulsado».
La imagen captada por Solar Orbiter «es absolutamente espectacular. Se ve material solar saliendo a grandes distancias del Sol. Es la más grande erupción solar jamás vista».
En este caso la eyección de material solar no estaba dirigida a la Tierra. ¿Qué sucede cuando esas partículas llegan a la Tierra? Se producen las famosas tormentas solares. Habría que llamarlas tormentas geomagnéticas (se producen en la Tierra), aunque su origen sea solar», señaló Del Toro Iniesta.
«Las partículas solares salen eyectadas con gran energía. A veces más rápido que la luz. En la Tierra encuentra nuestro escudo protector: el campo magnético terrestre» explica.
Efectos de la tormenta
«Las partículas están cargadas eléctricamente. Al llegar al campo geomagnético viajan hacia los polos. Se forman las auroras, y hay otros efectos». A veces las partículas pueden incluso vencer el escudo geomagnético. Llegan hacia zonas de la atmósfera más cercanas a la Tierra, como la ionosfera, alterando su química. «Los satélites, las radiocomunicaciones utilizan la ionosfera como espejo. Si alteras la ionosfera, alteras las comunicaciones».
Estas alteraciones pueden afectar los sistemas GPS, entre otras cosas. La Estación Espacial Internacional tiene una habitación del pánico, una cámara acorazada con plomo. Sirve para proteger a los astronautas de estas tormentas.
El bombardeo de partículas causó un apagón de varias horas en 1989 en toda Canadá y Estados Unidos. «Nuestra vida es cada vez más dependiente de la tecnología. Por eso, es cada vez más vulnerable a este tipo de fenómenos».
La misión Solar Orbiter permitirá a los científicos observaciones sin precedentes. Se acercará al Sol como jamás lo ha hecho nadie. Los instrumentos enviados proporcionarán información muy valiosa.