La luz que puede matar bacterias
Alternativa a los antibióticos
¿Por qué aumenta la resistencia bacteriana a los antibióticos? Por su incontrolado abuso. Es un problema global. Por eso, en Rusia pensaron en una alternativa. Y desde la Universidad Nacional de Investigación Nuclear (MEPhI) propusieron algo: la luz que puede matar bacterias.
Una luz al final
La solución a este problema global podría ser el desarrollo de una terapia fotodinámica antibacteriana (TFDA). Se basa en el uso de fotosensibilizantes, que se introducen en el cuerpo y durante el tratamiento se irradian con luz. Esto se transmite a las moléculas de oxígeno y las transforma en una forma activa que combate la infección. Cientìficos de la MEPhI propusieron usar bacterioclorinas policacionales sintéticas como fotosensibilizantes. Estos compuestos son de uso universal en el tratamiento de la TFDA. Esto ahorraría tiempo y recursos, al eliminar la necesidad de determinar el tipo de amenaza bacteriana.
Para la OMS, un agente antibacteriano eficaz es aquel que reduce el número de células activas del patógeno por lo menos 103 veces. Según los científicos del MEPhI, las bacterioclorinas que utilizan superan esta cifra por lo menos 10 veces. La rápida muerte de las bacterias está asegurada por la acción activa de oxígeno «cargado» con la energía del fotosensibilizador. Las bacterioclorinas en la solución tienen una carga eléctrica positiva. Eso aumenta la eficacia de los fotosensibilizantes en las bacterias.
Aplicación práctica
«Los experimentos mostraron una alta eficacia de las bacterioclorinas en cepas bacterianas resistentes a antibiótico. Esto aumenta seriamente nuestras posibilidades de éxito en los ensayos clínicos reales», comenta Ekaterina Ajliústina. Es estudiante de postgrado del Instituto de Ingeniería Biomédica de la MEPhI.
El área de aplicación más prometedora de la TFDA antibacteriana es el tratamiento de heridas y quemaduras infectadas. Según ellos, la luz que puede matar bacterias también proporcionaría un buen efecto cosmético.
«En la fase actual de las pruebas, estos compuestos ya pueden utilizarse con fines técnicos. Esperamos que se desarrolle una base de bacterioclorinas y una forma de dosificación para su uso en medicina y veterinaria», comenta Ekaterina Ajliústina.
Es necesario estudiar cuidadosamente la estabilidad y las propiedades fotodinámicas de los compuestos sintetizados. Posteriormente esto permitirá la correcta selección de las dosis para la creación de un medicamento hecho con nuevos compuestos.
Los compuestos químicos utilizados por el grupo de investigación, como los fotosensibilizadores, ya han sido patentados. Pronto se harán experimentos en tejidos y órganos humanos.
¿Hay bacterias? Hágase la luz.