La creatividad y la locura se relacionan, según la ciencia
Un estudio que abarca más de un millón de personas
La sutil frontera entre el genio y la locura se discute desde el tiempo antiguo. Séneca decía: “No existe un gran talento sin un toque de locura”. Ignoramos si fue pensando en Séneca que el Instituto Karolinska de Suecia inició una amplia investigación para determinar si existía verdad en esa frase apocalíptica. Sin embargo, podemos decir que dio en el clavo. La creatividad y la locura se relacionan.
Los resultados de esta investigación se publicaron en el Journal of Psychiatric Research. Entre otras perlas, estudia la actividad de una persona con autismo y el impulso maníaco de una persona con trastorno bipolar. Dice que puede proporcionar el foco y la determinación necesaria para el genio y la creatividad. Del mismo modo, prosigue el investigador, los pensamientos desordenados asociados con la esquizofrenia podrían suponer un elemento de suma importancia en la originalidad de una obra maestra. Con base a registros de la población sueca, Simon Kyaga, uno de los autores del estudio del Departamento de epidemiología médica y bioestadística del Instituto Karolinska, alcanzó a estudiar la fabulosa cifra de 1,2 millones de personas.
Sucede que un alto número de pacientes con esquizofrenia o trastorno bipolar se han dedicado a trabajos creativos. Como la escritura, por ejemplo. Pero tal vez ya intuías eso, tú, que escribes artículos de vez en cuando. Poemas sueltos en la pared del baño. Tal vez un diario de metafísicas y cursis reflexiones.
Escritor, profesión de riesgo
Por otra parte, el estudio reveló que los escritores son más propicios que la población general a sufrir enfermedades psiquiátricas (incluida la esquizofrenia, la depresión, el síndrome de ansiedad y el abuso de sustancias), así como casi un 50% más propensos a suicidarse. Recordarás, amable lector, el elevado número de escritores que a su vez son célebres suicidas, desde Hemingway a Pavese, pasando por Sylvia Plath y Virginia Wolf, la Pizarnik, Stefan Zweig, Ángel Ganivet, Sándor Marai, Yukio Mishima y un largo etcétera que no continuaremos en este artículo porque sería interminable. Los escritores, la creatividad y la locura se relacionan.
¿Quién dijo que no era una profesión peligrosa?