La altitud impulsa la evolución en las especies
Era un factor poco estudiado. Sin embargo, resultó vital para entender la evolución. El ascenso y descenso de la superficie terrestre transforma la naturaleza. Y ha sido así durante los últimos tres millones de años. La altitud impulsa la evolución en las especies. En particular, la evolución de las aves y los mamíferos. Lo dice un estudio publicado en la revista ‘Nature Ecology and Evolution’.
Variable inesperada
Se pusieron manos a la obra unos investigadores de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido. Revisaron cambios en la elevación de la superficie terrestre en los últimos tres millones de años. Se cruzó esto con los datos del cambio climático en ese tiempo. Además, con la localización de las especies de aves y mamíferos. Sus resultados revelan cómo las especies evolucionaron hacia otras nuevas. Y fue a medida que cambiaba la elevación de la tierra.
El efecto del aumento de la elevación es mayor que el del cambio climático histórico. Influye más en el origen de nuevas especies o ‘especiación’.
«En las cimas de las montañas hay muchas más especies únicas que no se encuentran en otros lugares. Antes se pensaba que la formación de nuevas especies estaba impulsada por el clima. Pero el cambio de elevación tiene un efecto mayor a escala global». Lo afirma el doctor Andrew Tanentzap, de la Universidad de Cambridge, autor principal del trabajo.
Aislando poblaciones
¿Qué pasa a medida que aumenta la elevación del terreno? La temperatura suele disminuir y la complejidad del hábitat aumenta. Al formarse montañas, el aumento de la elevación crea una barrera. E impide que las especies se muevan y se mezclen. Las poblaciones quedan aisladas reproductivamente. Este es el primer paso hacia la formación de nuevas especies.
«Es sorprendente cómo la elevación influye en la biodiversidad mundial. Es mucho más importante que la temperatura, por ejemplo», afirma el doctor Javier Igea. Trabaja en la Universidad de Cambridge, primer autor del trabajo.
Si la altitud impulsa la evolución en las especies, este cambio seguirá ocurriendo. Mientras la Tierra siga subiendo y bajando, la topografía seguirá siendo un importante motor de cambio evolutivo.