El planeta que forma espirales
Es un exoplaneta gigante, denominado MWC 758c. Y está provocando unas inusuales figuras en el espacio, al menos para ese tipo de cuerpos celestes. Se convirtió en el planeta que forma espirales.
Las representaciones de la Vía Láctea muestran un patrón enrollado de ‘brazos’ en espiral. Hay patrones similares en las nubes arremolinadas de gas y polvo que rodean algunas estrellas jóvenes. Se pensó mucho tiempo que los brazos espirales serían causados por planetas nacientes. Pero hasta ahora no se había detectado ninguno.
Espirales y planetas
«Hay evidencia sólida de que estos brazos espirales son causados por planetas gigantes», dijo en un comunicado Kevin Wagner. Es autor principal del estudio. «El telescopio James Webb probará esta idea mediante la búsqueda de más planetas como este».
La estrella del planeta se encuentra a unos 500 años luz de la Tierra y tiene solo unos pocos millones de años. Es un embrión en comparación con nuestro propio sol de 4.600 millones de años. Se necesitan alrededor de 10 millones de años para que los desechos en círculos sean expulsados del sistema. «Este sistema sería como fue nuestro sistema solar al principio de su vida útil», dijo Wagner. «Júpiter, al ser un planeta gigante, probablemente también interactuó. Esculpió gravitacionalmente nuestro propio disco hace miles de millones de años. Y finalmente condujo a la formación de la Tierra».
«Los brazos en espiral pueden proporcionar información sobre el proceso de formación de planetas», dijo Wagner. Los planetas gigantes se forman desde el principio, acumulando masa desde su entorno de nacimiento. Alteran gravitacionalmente el entorno posterior para que se formen otros planetas más pequeños».
Próximos planetas
Los investigadores finalmente pudieron detectar el planeta que forma espirales utilizando el Telescopio Binocular Grande, o LBTI. Puede observar en longitudes de onda más largas en el rango infrarrojo medio. Tiene una cámara que puede detectar luz infrarroja de manera similar al Telescopio Espacial James Webb de la NASA.
El LBTI se encuentra entre los telescopios infrarrojos más sensibles construidos hasta ahora y, debido a su mayor tamaño, puede incluso superar al JWST para detectar planetas muy cerca de sus estrellas, como MWC 758c.