El enorme volcán activo en Venus
En 1991, la sonda Magallanes de la NASA cartografió la superficie de Venus usando un radar. La humanidad contempló un planeta plagado de volcanes. Era imposible saber si estaban activos. Scott Hensley, investigador de la NASA revisó las imágenes con tecnología actual. Así confirmó la existencia del enorme volcán activo en Venus.
Evidencia volcánica
En la revista Science están los resultados. La Tierra no es el único planeta del sistema solar donde hay volcanes activos. Se halló una fisura volcánica de unos dos kilómetros cuadrados y una profundidad de 175 metros. Cuando la nave volvió a pasar por allí ocho meses después, la grieta había duplicado su tamaño. No podía ser más que lava. La roca fundida habría cubierto una superficie de casi 70 metros cuadrados.
El volcán es “la explicación más plausible”, asegura Hensley. La nueva erupción está en las faldas del Maat Mons, el volcán más alto de Venus, que se pensaba extinto. “Nuestro trabajo muestra nueva evidencia. Una estructura volcánica se formó en ocho meses de 1991. Es la prueba más concluyente de una erupción en el planeta”, resalta.
Con estas pruebas, Venus se convertiría en el segundo planeta del sistema solar con volcanismo activo junto a la Tierra. A estos dos se suma Ío, luna de Júpiter. Hay allí cientos de volcanes que escupen fuentes de lava a varios kilómetros de altura.
Retorno a Venus
Iván López es geólogo planetario de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Es experto en geología venusiana y participa en la misión ExoMars de la Agencia Espacial Europea. “Venus y la Tierra nacieron siendo gemelos”, explica. “Tienen prácticamente el mismo tamaño y la misma composición. Es posible que Venus incluso tuviese agua. Pero algo sucedió que desencadenó un efecto invernadero brutal. Todos los expertos en Venus pensamos que hay volcanes activos”, explica.
En 2031, Estados Unidos y Europa van a lanzar dos nuevas misiones a Venus. Estudiarán su espesa atmósfera en busca de vida. En ambas misiones, Veritas y EnVision, volverán a cartografiar el planeta en busca de actividad volcánica. Y tal vez visiten el enorme volcán activo en Venus otra vez.