El enorme agujero negro descubierto
Muy “cerca” astronómicamente
Es realmente gigantesco, respecto de otros que fueron detectados antes. El enorme agujero negro descubierto recientemente fue hallado a partir de los últimos datos recogidos por la misión Gaia de la Agencia Espacial Europea. Astrónomos afirman que se trata del agujero de este tipo más grande y más cercano detectado hasta ahora en la Vía Láctea.
Sucedió mientras los investigadores revisaban las observaciones de la sonda espacial Gaia. Observaron un claro bamboleo en una de las estrellas de Aquila. Se trata de una constelación visible en el cielo de verano en el hemisferio norte. El movimiento sugería que la estrella estaba siendo arrastrada por un agujero negro mucho más grande que el Sol. ¿Qué era aquello?
Muy cercano
Observaciones del Very Large Telescope del Observatorio Europeo del Sur, situado en el desierto chileno de Atacama, lo confirman. Calcularon la masa del agujero, bautizado BH3. También la órbita de la estrella que gira alrededor del agujero negro una vez cada 11,6 años.
«Es el agujero negro de origen estelar más masivo de nuestra galaxia. Y el segundo más cercano descubierto hasta ahora». Lo detalla el astrónomo Pasquale Panuzzo, citado por The Guardian.
Los agujeros negros suelen formarse cuando las estrellas masivas colapsan al final de su vida. Hasta ahora, han sido encontrados docenas en la Vía Láctea. Y la mayoría con un peso de unas 10 veces la masa del Sol. Pero el enorme agujero negro descubierto ese nuevo es 33 veces más masivo que el Sol.
Antigua presencia
«Solo hemos visto agujeros negros de esta masa en galaxias lejanas», agrega Panuzzo. El informe está publicado en la revista Astronomy & Astrophysics. Hallaron en las mediciones de la estrella compañera de BH3. No había indicios de que estuviera impregnada de material procedente de la explosión estelar que formó el agujero negro. Eso sugiere que el agujero negro se formó mucho antes de atrapar a la estrella compañera en su poderoso campo gravitatorio.
Los científicos esperan observar con mayor detalle el agujero negro y su estrella, con la esperanza de seguir desentrañando sus secretos.