El CRISPR es una de las mayores esperanzas de la medicina: podrían eliminarse enfermedades heredadas genéticamente o curar cánceres, entre otras cosas. Muchos de los conceptos del CRISPR están sometidos actualmente a ensayos clínicos o simplemente a pruebas de conceptos, incluyendo, de manera controvertida, los embriones humanos.
Han habido rumores acerca de que investigadores chinos participan en este tipo de experimentos desde hace algún tiempo atrás, pero estos embriones se cree que son inviables, lo que significa que no sobrevivirían al embarazo. Pero el año pasado, fue noticia que un equipo de investigadores suecos se convirtieron en los primeros del mundo en utilizar el CRISPR en embriones humanos sanos, los cuales fueron destruidos después de dos semanas.
Ahora, parece que un equipo americano ha dado otro paso más. Como afirma el MIT Technology Review, investigadores de la Universidad de Oregon han editado el ADN de un gran número de embriones humanos con un solo «tomo» de CRISPR.
Este equipo ha demostrado que es posible utilizar dicha técnica para corregir los errores genéticos que conducirán a complicaciones en la vida. Al igual que con los experimentos suecos y chinos, esta investigación muestra que el primer bebé CRISPR del mundo está a la vuelta de la esquina.
Los resultados aún no han sido publicados por ninguna revista revisada, pero se sabe que han editado ciertos errores genéticos asociado a ciertas enfermedades, aunque aún no se ha hecho públicas cuáles. También, como en los casos anteriores, destruyeron dichos embriones.
Cuando se trata de editar embriones, mucha gente piensa en que se podrá escoger el color de piel, el de ojos, «darle» la mayor inteligencia posible… cosas, en general, que puede traer mucha controversia. Sin embargo, ciertas organizaciones gubernamentales han afirmado que a partir de este año se crearán leyes para que la edición de genes sea bajo supervisión explícita de que no sea para fines de, por decirlo de algún modo, «diseño».
De hecho, esta técnica debe usarse únicamente con el propósito de eliminar enfermedades en embriones. Si es así, las enfermedades crónicas incurables podrían borrarse repentinamente, y estamos seguros de que pocos argumentarían en contra de este tipo de futuro.
