Científicos crean un brazo robótico con tejido muscular
Científicos del Instituto de Ciencias Industriales de la Universidad de Tokio ha creado un robot biohíbrido que integra tanto tejido vivo con metal.
Como informan en la revista Science Robotics, se cultivó un grupo de músculos en laboratorio obtenido de ratas y luego los aplicaron a un esqueleto robótico hecho con metal y plástico. Después, se usó electrodos para provocar una contracción.
Los científicos llevan décadas fascinados con la idea de crear un robot biohíbrido, pero la gran mayoría de avances han acabado fracasando. Hacer robots es una cosa; darles «vida», otra muy distinta. Pero este nuevo modelo tiene una vida útil considerablemente más larga que otros, ya que sus músculos son capaces de contraerse y expandirse. Gracias a este desarrollo, pudo bombear hierro durante más de una semana sin perder funciones.
«una vez habíamos construido los músculos, los utilizamos con éxito en el robot, para contraerse y expandirse, al igual que pasa en un cuerpo humano», afirma uno de los autores, Shoki Takeuchi, en un comunicado.
En las pruebas realizadas por el cyborg, pudo recoger con delicadeza un pequeño anillo y colocarlo en una clavija, así como levantar objetos pequeños, como puedes ver en el vídeo de arriba. «Nuestros hallazgos muestran que, con esta disposición antagónica de los músculos, estos robots pueden imitar las acciones de un dedo humano», afirma el autor principal, Yuya Morimoto.
Obviamente, será un avance de difícil y tardía implantación; pero no obstante es un avance bastante importante en el campo de la robótica biohíbrida. Yuya añadió que «si podemos combinar más de estos músculos en un solo dispositivo, deberíamos poder reproducir la compleja interacción muscular que permite que las manos, los brazos y otras partes del cuerpo funcionen».