Cambian el sexo de las gambas para aumentar el rendimiento económico
Las ansias por generar dinero pueden llegar a límites insospechados. Y es que, un proyecto desarrollado por la Universidad Ben-Gurión del Néguev, en Israel, permite el cambio de sexo en las gambas a través de una inyección en la glándula androgénica, un órgano único de los crustáceos que regula la diferencia sexual y la producción de los órganos reproductores masculinos. La inyección suprime la hormona que produce esta glándula haciendo así que se silencie la expresión del gen que codifica la sexualidad. Esta técnica se llama silenciamiento génico temporal.
Con este procedimiento, los científicos pueden crear ‘neo-hembras’, que son gambas genéticamente masculinas pero con toda la estructura interna de una gamba hembra para poder reproducirse. Estas ‘neo-hembras’ son luego criadas con machos normales, lo que hace que toda su descendencia sea masculina.
El profesor Amir Sagi, que dirigió el equipo de investigación, afirma que los trabajadores pueden inyectar a mano cerca de 2.000 dosis de silenciamiento génico temporal a gambas en Israel para luego enviarlas a Vietnam, China e India, países que han demostrado un mayor interés para aplicar esta técnica. Cada gamba puede liberar miles de huevos cada una, y a lo largo de varios ciclos, millones de gambas machos pueden ser producidos, aunque solo la generación naciente de la gamba inyectada con el silenciamiento génico temporal se verá afectada. Estiman que, con este desarrollo, los responsables de la cría y venta de gambas podrían aumentar sus beneficios en un 60%.