La estructura básica de los ojos felinos es bastante similar a la que tenemos los seres humanos, pero la visión de los gatos se ha adaptado a propósitos muy diferentes, por lo que el mundo que ellos ven es similar pero con algunas pequeñas diferencias. Como depredadores que son, tienen que ser capaces de detectar el movimiento y poder ver a través de muy poca luz. Para poder hacer ese trabajo, el proceso evolutivo de la visión de los gatos ha tenido que sacrificar algunos detalles que los humanos sí podemos percibir a través de nuestra vista.
El artista Nickolay Lamm se puso en la piel de un gato para echar un vistazo al mundo e inspirarse para su nueva obra. Para ello, se puso en contacto con oftalmólogos de la Escuela Veterinaria de la Universidad de Pennysilvania para crear estas visualizaciones comparando la vista de un gato y la de un humano. Los bordes borrosos de la imagen inferior representa la visión periférica, ya que los humanos tenemos un grado de visión a cada lado de 20 grados, mientras que la de los gatos llega a los 30 grados. Así pues, nosotros tenemos una capacidad visual de 180º mientras que la de los gatos es de 200º.
Pero nosotros tomamos ventaja en las distancias largas. Lo que nosotros podemos ver a una distancia de 30 metros, los gatos no pueden distinguir con claridad más allá de los 6 metros. Y según afirman algunos investigadores, ellos pueden ver el azul y el amarillo, pero no el rojo, el naranja o el marrón, por lo que su visión se ve un poco más descolorida.
Pero en la oscuridad, ellos salen ganando. Pueden llegar a ver de seis a ocho veces mejor que nosotros, en parte debido a que tienen más bastones, un fotorreceptor ubicado en la retina. Sus pupilas elípticas permiten que estas sean abiertas cuando hay muy poca luz, y además poseen un tejido llamado tapetum lucidum que está situado en la parte posterior del ojo y que hace rebotar la luz que llega a través de la retina para tener una segunda oportunidad de ser absorbida por los bastones. Esto es lo que causa esos ojos brillantes de los gatos por las noches.
