7 mitos sobre el cuerpo humano
«¡Abrígate que te vas a constipar!»: ¿Cuántas veces nos han dicho esto? Más fácil, ¿existe alguien que sus padres no se lo hayan dicho nunca? No creo.
El hecho de que únicamente la temperatura nos puede causar resfriados y la gripe, es algo que se ha dado por hecho y que es completamente falso. Las gripes son causa de los virus, y aunque es cierto que se propaga más fácilmente en épocas frías, realmente tienes más probabilidades de contagiarte en un espacio cerrado que en uno abierto. Como puedes ver, es prácticamente lo contrario que siempre te habían dicho.
«¡No te metas en el agua, que estás haciendo la digestión!»: Otra frase que seguramente a todos nos hayan dicho, sobre todo en verano y cuando eramos niños. ¿El tiempo que debíamos esperar? Todo dependía de quién nos lo dijese. A unos nos dijeron 30 minutos, otros una hora, hora y media… Lo primero, es que la comida tarda horas y horas en digerirse, por lo que si el bañarse mientras estamos haciendo la digestión fuese un problema, no podríamos hacerlo prácticamente hasta casi la noche. Luego, otro rumor acerca de esto es que la sangre se concentraría prácticamente en su totalidad en el estómago y las extremidades se verían afectadas por una supuesta falta de circulación. No, falso.
Las venas son azules: Tampoco. ¡Tus venas te están engañando! No, lo que realmente ocurre es un efecto óptico. Esto ocurre porque la luz blanca que se forma con todos los colores del espectro penetra hasta cierta profundidad y hace que percibamos como azul el color de las venas.
«Si tragas chicle se te pegará al estómago durante X tiempo»: Esta afirmación se lleva escuchando desde que la goma de mascar fue comercializada, a mediados del siglo XIX. Hay diversas variedades acerca de este mito, unos dicen que es porque se te queda pegada a la pared intestinal, y otros porque los propios jugos no pueden digerirlo. Aunque este último punto es cierto, no se quedará atrapado en tu cuerpo por mucho tiempo (al menos no un tiempo más largo que el resto de alimentos que ingieras), ya que el chicle simplemente irá viajando a través de tu intestinos hasta que acabes por expulsarlo.
Si te afeitas te saldrá más pelo: Esta cuestión la tratamos unas semanas atrás, pero no está de más recordarla. Insistimos; afeitarte no hará que tu pelo crezca más, ni que aparezca más pelo, simplemente se trata de un efecto óptico ya que la punta del pelo es más fina que la parte más cercana a la piel.
Despertar a un noctámbulo puede ser peligroso: Puede serlo, pero para ti, dependiendo del humor de esa persona… Ahora en serio, siempre hemos escuchado que despertar a un noctámbulo puede ser peligroso para su corazón o para su cerebro, pero es falso. De hecho, es más peligroso no despertarle y dejarle hacer cualquier actividad, ya que puede caerse por las escaleras, salir a la calle o incluso ponerse a conducir.
Sentarse cerca del televisor puede afectar tu vista: Según este mito, el brillo y las imágenes en movimiento del televisor podría afectar a tu visión, llegando a la ceguera en los casos más extremos, o también provocando estrabismo. Este mito tiene su origen en un estudio realizado en 1970 que relacionaba el uso del televisor con la epilepsia, que si bien es cierto que puede provocarla, no tiene por qué afectar la distancia a la que ves el monitor. Eso sí, procura no estar demasiado rato, ya que las exposiciones largas sí que pueden afectarte.