La solución para dejar de roncar siempre ha estado al alcance de nuestra mano, sólo hay que empezar a cantar.
Alise Ojay, una directora de coros británica, sufrió los ronquidos de su marido durante años. Llevó acabo un experimento con él y le propuso realizar una serie de rutinas de vocalización durante 20 minutos al día. Antes de un mes, los ronquidos disminuyeron notablemente.
Ojay contactó a Edzard Ernst, un médico de la Universidad de Exeter especializado en medicina complementaria, para ver si su hallazgo tenía validez científica. Ambos realizaron un estudio, esta vez con 20 personas durante un lapso de tres meses y los resultados fueron positivos.
Los ejercicios de canto fuerzan la garganta, logrando así fortalecer músculos específicos, evitando que el aire pase fuertemente, lo que provoca el ronquido.
En promedio, aquellas personas que redujeron más la intensidad de sus ronquidos fueron los que hicieron los ejercicios de canto de forma más constante y fiel a los originales. Eso sí, el método de cantar para dejar de roncar no funcionó en personas con sobrepeso o problemas nasales, dos condiciones que de por sí pueden causar fuertes ronquidos.
Este método creada por Ojay se utiliza en estudio clínicos en los Estados Unidos, buscando saber si la rutina de ejercicios de vocalización tienen resultados positivos entre los pacientes que sufren de casos leves o moderados de apnea del sueño.
