A veces los tesoros están en los lugares menos pensados. Por ejemplo, en una alcantarilla. Esto sucedió durante las obras de reparación de unas tuberías de alcantarillado. ¿En dónde? En el parque Appia Antica de Italia. Se halló una estatua de Hércules en una alcantarilla.
Se trata de una estatua de mármol de Hércules de tamaño natural. La escultura del antiguo personaje mitológico fue creada entre el 27 a.C. y el 476 d.C. Los arqueólogos aseguraron que la estatua no fue encontrada en su lugar original.
Hércules escondido
«Esta zona nos reservó una gran sorpresa. Es una estatua de mármol de tamaño natural. Exhibe la maza y el manto de león que cubren su cabeza. Podemos identificar con certeza como una figura que representa a Hércules», declararon los representantes del parque Appia Antica.
No obstante, los arqueólogos hicieron una observación. La escultura no se halló donde probablemente la exhibieron los antiguos romanos. Deducen que la estatua quedó enterrada aquí durante la construcción del sistema de alcantarillado. Esto pasó en la primera mitad del siglo XX.
«En aquella época no había excavaciones arqueológicas. Así que esto podría haber ocurrido». Lo declaró a los medios locales Francesca Romana Paoliglio, miembro del Ministerio de Cultura italiano.
Más estatuas
Las excavaciones tenían lugar en el extenso parque regional de Appia Antica. Este abarca más de 4.500 hectáreas. Aquí hay numerosos monumentos arqueológicos e históricos. Entre estos, acueductos, la Vía Latina y la Vía Apia. Se trataba de una importante ruta comercial y estratégica. Unía Roma con las zonas meridionales de la península de los Apeninos. Así originalmente llegaba hasta la ciudad italiana de Capua y más tarde se amplió hasta el puerto de Brundisium, actual ciudad de Bríndisi.
Una estatua de Hércules en una alcantarilla no fue la única sorpresa. El pasado 30 de diciembre hubo otras. Se halló una estatua masculina de más de dos metros de altura. También cabezas de estatuas de los dioses de la mitología griega, Eros como Dionisio, y el semidiós Heracles. Se descubrieron en la antigua ciudad de Aizanoi, en Turquía.
