Una nueva investigación arqueológica revela que la «dieta paleo» original contenía trigo y cebada, y no se limita sólo a carne y verdura. Así pues, los seguidores de este tipo de práctica alimenticia se equivocarían en la exclusión de ciertos alimentos.
Científicos de Cambridge, Cardiff y York estudiaron los restos de nueve personas que vivieron hace 9.000 años, a finales del Mesolítico (6.600 – 6.450 a.C.) y en la fase Mesolítico-Neolítico (6.200 – 5.900 a.C.), y se encontró material vegetal fosilizado en sus dientes.
Gracias a la mala higiene dental, lo que hoy son micro-fósiles antes eran cereales, alimento que se pensaba que formaba parte de las dietas en las sociedades que surgieron cuatro siglos después; los restos quedaron atrapados en la placa de sus dientes, quedando bien conservado hasta hoy en día.
«Han habido muchas opiniones respecto lo que comían tanto en el Paleolítico como en el Mesolítico, sobre todo gente que creía que el pescado y las proteínas de origen animal era el alimento principal con un papel muy limitado de los alimentos de origen vegetal», afirma Dusan Boric, investigador principal.
La gente del Mesolítico se creía que eran cazadores-recolectores, y que vivían en grandes bosques; el Neolítico le siguió en la línea temporal, y es entonces cuando se cree que surgió la agricultura y, por ende, el cultivo de cereales.
El descubrimiento de que las personas del Mesolítico comían cereales significa que los recolectores y las primeras comunidades neolíticas surgieron mucho antes de lo que los arqueólogos pensaban originalmente.
