Los monarcas de la historia más locos y excéntricos
Cuando las personas eligen a sus gobernantes, exigen rectitud, integridad, pero por sobre todo, cordura. Sin embargo, los registros en la historia cuentan que no era así. Los emperadores, reyes, reinas, zares o faraones, recibían sus cargos de sus progenitores sin más exigencia que su nombramiento. Algunos monarcas de la historia eran bien raros. ¿Por un problema en el cerebro?, ¿alguna enfermedad? o simplemente tenían extrañas actitudes.
La mayoría de los monarcas de la historia no estaban preparados para gobernar
De hecho, a muchos de esos monarcas los nombraron reyes el mismo día de su nacimiento o cuando todavía eran unos niños. Puyi, emperador de China, lo nombraron a los dos años de edad, Isabel II de España, fue consagrada reina con tan solo tres años, y estos son solo algunos ejemplos.
El verdadero problema surgía porque estos monarcas de la historia, no tenían preparación para gobernar y muchos de ellos además sufrían de enfermedades mentales. Algunos solo eran extravagantes. Pero otros fueron muy crueles con sus súbditos y quienes les rodeaban.
Historias destacadas de algunas locuras
Jorge III de Inglaterra
Jorge III fue rey de Inglaterra desde 1760 hasta 1820. El rey sufría una enfermedad llamada porfiria. Es una afección que ataca el sistema nervioso. También produce daños neurológicos irreparables y lagunas mentales. Los últimos años de su reinado los pasó entre rejas, con camisas de fuerza y su mujer e hijo debieron hacerse cargo de sus funciones de monarca.
Carlos VI de Francia
Carlos VI fue rey de Francia entre 1380 y 1422, siendo un niño de tan solo 11 años cuando fue inició su reinado. Sus tíos eran los regentes hasta su asunción en 1388. Pero en 1392 comenzó con convulsiones y fiebre muy alta. Los ataques afectaron su cerebro. Su locura tenía períodos que duraban hasta nueve meses. Luego pasaba por lapsos en los que se mantenía cuerdo. Estos ataques se sucedieron por el resto de su vida.
Calígula de Roma
Calígula fue un emperador romano, quizá el más cruel, extravagante, depravado y despiadado de la historia. Su verdadero nombre era Cayo César y gobernó Roma desde el año 37 al 41 de nuestra era. Luego de asumir, enfermó de gravedad, pero cuando mejoró se convirtió en un déspota cruel, que ordenaba matar personas en forma arbitraria.
Mostraba un amor desmedido por sus hermanas, a las que se cuenta que atacó sexualmente en más de una oportunidad. Es conocida su debilidad y fijación por Drusilla, de quien quería un heredero de sangre pura. La historia cuenta que nombró a su caballo Cónsul de Roma, aunque se dice que es falsa.
Juana de Castilla
Juana de Castilla era hija de los reyes católicos y tenía una educación excelente. Pero sus padres la casaron con Felipe el hermoso, un archiduque austríaco. Heredera del trono de Castilla y León y de Aragón. No la dejaron gobernar por el simple hecho de ser mujer.
Felipe le fue muchas veces infiel y Juana enfermó de celos por estar muy enamorada de él. En 1506, Felipe muere de fiebre tifoidea con tan solo 28 años de edad y Juana no permite que enterraran su cadáver. Durante meses recorrió España con el cuerpo de su esposo a cuestas. Juana estaba embarazada en esa época y una vez que dio a luz a su hija, fue encerrada hasta avanzada edad.
Los casos mencionados son solo algunos de los tantos que existen. ¿Cuál será el punto coincidente entre todos ellos? Tal vez tener acceso al poder acerca a la persona a un grado alto de locura.