Los misterios de las pirámides de Giza siguen convocando a estudiosos y expertos de casi todas las ciencias. Su construcción, de donde provienen las piedras, la iluminación dentro de las bóvedas y su alineación exacta con los astros y los puntos cardinales, entre otros, son los temas que más apasionan. Aunque esa alineación tan perfecta, es lo que más llama la atención científica. ¿Cómo hicieron los ingenieros egipcios de hace 4500 años para que la alineación con las tres estrellas de Orión fuese tan perfecta?. Además, en la Pirámide de Giza mayor, cada uno de sus lados coincide con los puntos cardinales con una exactitud increíble.
Alineación de las Pirámides de Giza
Esta alineación ya no es una incógnita. Científicos de la Universidad de Harvard descubrieron cómo lo hicieron. Publicaron el estudio en Journal of Ancient Egyptian Architecture. Las pirámides de Giza tienen una alineación perfecta gracias al movimiento terrestre con respecto al sol mediante la sombra que deja a su paso.
Los antiguos egipcios eligieron el equinoccio de otoño para el trazado de la construcción en Giza. Los científicos de Harvard usaron un gnomon, que es una vara clavada en la tierra en una posición fija y determinada. Registrando la sombra que la vara deja en el terreno a intervalos, se traza una línea perfecta de este a oeste.
Los científicos analizaron el experimento y lograron la misma exactitud que los antiguos egipcios. Notaron que, a pesar del paso de milenios, la sombra del sol sobre la tierra sigue sin variación hasta el presente.
El estudio de las pirámides es ancestral
Los misterios sobre Egipto nacieron desde que un joven Napoleón desembarcó allí en 1798 con 30.000 soldados. Entre sus huestes, Napoleón contaba con muchos científicos de la época. Eran matemáticos, arquitectos, físicos, arqueólogos, químicos, ingenieros, entre otros. A partir de este viaje, nació en Europa la obsesión por estudiar los misterios ancestrales de Egipto.
Sin embargo, siempre, uno de los misterios más estudiados fue la alineación de las pirámides con los astros. Los Egipcios no dejaron escrito sobre cómo lo hicieron. Desde que Champollion descifró los jeroglíficos se conoce el porqué alinearon las pirámides de Giza con las tres estrellas de Orión.
Los egipcios creían que las estrellas de esa constelación corresponden a Isis y Osiris. Las pirámides apuntan a esas estrellas porque los faraones, al morir, son recibidos por Osiris, para conducirlos directamente al juicio final en el otro mundo.
Aunque el método para alinear las pirámides no resultó tan misterioso, el conocimiento que tenían sobre las ciencias, muchas veces desconcierta a los expertos de nuestra era.
