Las monedas perdidas del pirata más buscado
Tesoro del siglo XVII
¿Quién ni soñó con encontrar el tesoro de un pirata? ¿Qué se necesita para conseguirlo? Tal vez, solo ser un arqueólogo aficionado. Un grupo de ellos en EEUU encontraron varias pequeñas monedas de plata enterradas. Son árabes, de la década del 1690. Este hallazgo arroja luz al misterio del asalto pirata más audaz de la historia. Al parecer, son las monedas perdidas del pirata más buscado del mundo.
Juntando monedas
La primera de estas monedas la encontró Jim Bailey. Es un historiador aficionado y detector de metales. La moneda estaba en una granja de la ciudad de Middletown. Dos años antes halló antiguas monedas coloniales, una hebilla de zapatos del siglo XVIII y algunas balas de mosquete.
Hasta la fecha se hallaron 16 monedas de finales del siglo XVII con texto en árabe. Diez de ellas se encontraron en Massachusetts. Otras tres en Rhode Island y dos en Connecticut, y una en Carolina del Norte. Son las más antiguas jamás encontradas en Norteamérica.
Al comparar los datos disponibles, Jim Bailey descubrió algo. Estas monedas pueden revelar un gran secreto. Se trata de uno de los robos más audaces y sangrientos de la historia de la piratería. Lo acometió el brutal pirata inglés Henry Every. Se convirtió en el criminal más buscado del mundo. Fue tras robar un barco que transportaba peregrinos musulmanes a la India desde La Meca.
Sucedió el 7 de septiembre de 1695. El barco pirata Fancy era comandado por Every. Emboscó y capturó al Ganj-i-Sawai, un barco real, propiedad del emperador mogol de la India. A bordo halló muchas riquezas. La banda torturó y mató a los hombres a bordo del barco indio y violó a las mujeres.
Las estimaciones indican un botín de unas 600.000 libras, incluyendo 500.000 piezas de oro y plata. La cantidad equivale a unos 108 millones de dólares. Los piratas se refugiaron en las Bahamas. Cuando se supo del saqueo, el rey inglés Guillermo III puso una gran recompensa por sus cabezas.
Piratas en Norteamérica
Respecto a la moneda, la investigación confirmó fue acuñada en 1693 en Yemen. No hay pruebas de que los colonos americanos viajaran a ningún lugar de Oriente Medio para comerciar hasta décadas después.
Bailey aseguró que las monedas encontradas son la prueba de que el famoso pirata llegó a las colonias americanas. Una de las monedas fue hallada en Carolina del Norte. Según los registros, algunos de los hombres de Avery desembarcaron allí por primera vez. «Parece que algunos de sus tripulantes pudieron establecerse en Nueva Inglaterra», aseguró Sarah Sportman. Es arqueóloga estatal de Connecticut.
Avery pudo esconderse a plena vista haciéndose pasar por un comerciante de esclavos. De camino a las Bahamas, incluso se detuvo en la isla francesa de la Reunión para conseguir algunos cautivos negros.
Bailey ha publicado sus hallazgos en una revista de la Sociedad Numismática Americana.