La higiene en el Antiguo Egipto no solo era una práctica cotidiana, sino un reflejo de su cultura y creencias. Los egipcios valoraban profundamente la limpieza, considerando que la pulcritud era esencial tanto para la salud como para el bienestar espiritual. Sus costumbres de higiene eran complejas, variadas y detalladas.
Baños diarios y limpieza corporal
En el Antiguo Egipto practicaban la higiene personal meticulosamente. Se bañaban todos los días, utilizando el Nilo o baños privados en sus hogares. Una mezcla de agua y natrón, un carbonato de sodio natural que les servía como jabón. Este ritual diario de limpieza era esencial para ellos.
Después del baño, se untaban aceites y ungüentos perfumados. Estos productos les permitía mantener la piel suave y también oler bien. Además, de esta manera se protegían contra el sol y el clima seco. El uso de aceites perfumados eran una parte integral de su rutina de cuidado personal.
Cuidado del cabello y pelucas en el Antiguo Egipto
El cuidado del cabello también era fundamental. Lo trataban con aceites y arcillas naturales para mantenerlo saludable. Asimismo, para evitar infestaciones de piojos y mantenerse frescos, muchos se afeitaban la cabeza y usaban pelucas elaboradas, que simbolizaban estatus y belleza. También usaban coronas y tocados de tela que se llamaban nemes.
Había una amplia variedad de pelucas en formas, tamaños y colores, de excelente calidad y muy similares a las actuales. También usaban extensiones y tintes para embellecer aún más su cabello.
Otras prácticas que implementaban para mejorar su higiene
Los egipcios también se preocupaban por su higiene dental. Usaban dentífricos hechos de piedra pómez, ceniza y mirra. Con ellos limpiaban su dentadura y combatían el mal aliento. Además, se ayudaban con palillos de dientes hechos de ramitas y cepillos rudimentarios.
El maquillaje era esencial para estos hombres y mujeres. Usaban kohl para delinear los ojos, que además los protegía contra infecciones oculares y el sol. Los perfumes y aceites perfumados eran comunes y los utilizaban tanto en rituales religiosos como en la vida diaria para mantener un buen olor corporal.
Debido a su interés por la limpieza, los egipcios mantenían sus hogares impecables. Barrían y limpiaban con regularidad cada espacio de sus viviendas. Utilizaban vasijas y pozos para eliminar los desechos, y reciclaban los residuos humanos para producir fertilizantes para la agricultura.
El Antiguo Egipto destacó por su meticulosa higiene y costumbres de pulcritud. Estas prácticas, los hace únicos en la historia de la higiene.
