¿Dónde estaba la respuesta? En un cargamento de almendras. Los misterios del famoso naufragio de la era helenística del Kyrenia se revelaron gracias a eso. El naufragio fechado gracias a las almendras fue descubierto y recuperado en la costa norte de Chipre en la década de 1960.
Las almendras analizadas en laboratorio identificaron la cronología más probable del hundimiento del Kyrenia. Sucedió entre 296 y 271 a. C. El artículo se publica en PLoS ONE. El Kyrenia es el primer gran barco griego del período helenístico que se encontró con un casco prácticamente intacto. Su carga incluía cientos de vasijas de cerámica.
Momento histórico
«Esta evidencia estaba intacta por 2000 años en el fondo del mar», dijo en un comunicado Stuart Manning. Es profesor del departamento de Arqueología Clásica y autor principal del estudio. «Fue un momento histórico. Los naufragios son cápsulas del tiempo únicas y se puede lograr una conservación asombrosa».
Durante las últimas seis décadas, el Kyrenia brindó información clave sobre la tecnología de los barcos antiguos. Pero la cronología de su procedencia era un misterio. Se pensaba que se construyó y se hundió a finales del siglo IV a. C.
El mayor obstáculo para datar con precisión el Kyrenia era el polietilenglicol (PEG). Es un compuesto a base de petróleo. Se aplicó a la madera para que no se descomponga al sacarla del océano. «Quitamos el PEG de la madera y lo datamos por radiocarbono. Así confirmamos su edad», dijo Manning.
Almendras
Se estudiaron los materiales orgánicos hallados en el barco. Entre ellos, miles de almendras verdes frescas encontradas en algunas de las grandes ánforas. Estos materiales de muestra de «vida corta» ayudaron a definir la fecha del último viaje del barco.
El naufragio fechado gracias a las almendras y la novedosa técnica de los investigadores sigue dando que hablar. Los restos milenarios del barco siguen siendo una ventana a un pasado que nos fascina por siempre.
