Una nueva técnica de rayos X permite ver vasos sanguíneos y células de las momias
Los arqueólogos han utilizado los rayos X para estudiar momias desde el siglo XX. Unos 120 años después, las técnicas de imágenes utilizadas para aprender sobre la vida y la muerte de estas personas se ha vuelto increíblemente poderosas. Por ello, investigadores suecos han desarrollado una técnica que puede obtener imágenes del tejido blando de una momia antigua a nivel microscópico, incluso recogiendo los restos de células individuales.
Como informa la revista Radiology, los investigadores del Real Instituto de Tenología KTH y el Albanova University Center de Estocolmo, Suecia, han utilizado una técnica de tomografía computarizada para obtener imágenes del tejido blando de la mano de una antigua momia egipcia. Dentro de estas imágenes, podemos ver detalles más finos, con una resolución entre 6 y 9 micrómetros, un tamaño solo un poco mayor que un glóbulo rojo humano.
La mano fue traída de Egipto a Suecia a finales del siglo XIX y data de, aproximadamente, el año 400 a.C.. Esta neuva técnica permite ver nervios musculares e incluso vasos sanguíneos, diferentes capas de la piel e incluso restos de células adiposas.
Esta técnica no solo se utilizará para crear imágenes de ultra definición para documentar momias antiguas, sino que también podría usarse para aumentar nuestra comprensión de ciertas enfermedades antiguas.
«Para estudiar los huesos y otros materiales duros y densos, las técnicas anteriormente utilizadas no funcionaban del todo mal, pero era demasiado poco eficaz para encontrar información detallada», afirma Jenny Romell, del Real Instituto Tecnológico de KTH.
Todavía es temprano para esta técnica, especialmente en este campo, pero los investigadores argumentan que algún día podría ser ampliamente utilizado para el estudio de momias y otros restos antiguos.