A través de la cadena de televisión KSL, vía Digital Trends, hemos podido conocer la historia del sargento Shaun Frank.
Este hombre recibió una llamada de auxilio de un vehículo el cual se había quedado atascado, cuando llegó al lugar vio como un joven con una bomba suicida pegada a su cuerpo aparecía, trató de dispararle antes de se acercara a el, pero la bomba estallo a pocos metros.
La metralla que poseía el artefacto lo hirió en piernas manos y en el rostro, aunque la peor parte se la llevó su iPhone 5S el cual se llevó el trozo de metralla mas grande.
Los médicos que atendieron al sargento afirman que por la fuerza del impacto y el lugar en el que el hombre llevaba el teléfono este seguramente salvó su vida.
Para su suerte se trataba del modelo que poseía una carcasa de aluminio, ya que el 5C tiene una de plástico, la cual seguramente no hubiera absorbido tan bien el impacto.
