Un hombre lleva desde 2004 sin poder parar de reir
Hay gente que es muy risueña y se ríe por cualquier cosa, pero no es el caso de Malcom Myatt, este hombre de 68 años no puede parar de reír.
Esto es debido a unas secuelas que le quedaron por un derrame cerebral sufrido en el año 2004, Malcom estaba trabajando de camionero, cuando llegó la hora de comer se paró para prepararse algo y cuando se detuvo alguien golpeo su camión haciendo que este volcara, dañándose el lóbulo frontal, que es la parte del cerebro que controla las emociones de la persona y su conducta.
En un principio los médicos no creían que su recuperación fuera posible, pero después de nada menos que 19 semanas en el hospital comenzó a mostrar alguna mejoría, ahora mismo tiene su brazo izquierdo inutilizado y solo puede caminar si se trata de una distancia más bien corta y ayudándose de un bastón, pero lejos de apenarse mira el lado positivo, le es imposible sentir tristeza.
Este hombre ha perdido la capacidad de juzgar si las cosas están funcionando bien o mal, “Siempre he sido una persona feliz y me encanta contar chistes, pero ahora nunca me siento triste. Recuerdo que yo solía ser capaz de sentirme triste, si pasaba algo malo, pero simplemente no sucede más.»
Por algún motivo su cerebro olvidó la forma de sentirse triste y se decantó por la alegría, por lo que ahora no puede parar de reír; “Nunca estoy deprimido. Estar triste no ayudaría nada de todos modos. Sin duda prefiero ser feliz todo el tiempo que a la inversa. Es una ventaja realmente”