Tocar un instrumento hace que los niños tengan más conexiones cerebrales
Enseñar a tus hijos a tocar un instrumento ayuda a desarrollar nuevas conexiones cerebrales que se mantienen durante el resto de sus vidas. De acuerdo con una nueva investigación que se presentará en la próxima reunión anual de la Sociedad Rodiológica de América del Norte, en Chicago, estas vías inducidas musicalmente podrían incluso ayudar a evitar el autismo y el trastorno de hiperactividad con déficit de atención.
En un comunicado, la investigadora Pilar Dies-Suárez ha explicado que «se ha sabido que la instrucción musical beneficia a los niños con ciertos trastornos», pero hasta ahora nadie había identificado cómo la práctica de la música produce este efecto.
La investigadora, junto con su equipo, decidió escanear los cerebros de 23 niños de entre cinco y seis años utilizando una técnica llamada imagen de tensor de difusión, antes y después de un curso de nueve meses de formación musical, en el que aprendieron a tocar los ‘boomwhackers’, unos tubos de diferentes longitudes que producen diferentes tonos cuando se soplan.
Los investigadores se centraron en la sustancia blanca, que contiene las fibras nerviosas (conocidas como axones) que conectan las neuronas de modo que las diferentes regiones del cerebro pueden comunicarse entre sí.
Investigaciones anteriores han demostrado que los niños con autismo y con hiperactividad con déficit de atención tienden a tener una disminución de la materia blanca en ciertas regiones de la corteza frontal del cerebro, lo que indica una menor cantidad de axones.
Al cabo de nueve meses con el instrumento, las imágenes revelaron que el volumen de materia blanca en la corteza frontal de los 23 niños había aumentado, lo que indica que la práctica de música había provocado la generación de nuevos axones y, por lo tanto, mejorar la conectividad entre diferentes regiones del cerebro.
«Cuando un niño recibe una educación musical, se les pide a sus cerebros que completen ciertas tareas», afirma la experta. «Estas tareas implican escuchar, movimientos locomotores, aprendizajes cognitivos, emotivos y el desarrollo de habilidades sociales, que parecen activar estas diferentes áreas del cerebro. Estos resultados pueden haber ocurrido debido a la necesidad de crear más conexiones entre los dos hemisferios del cerebro».