Joseph Birch y Sotiris Charalambous son dos jóvenes que paseaban tranquilamente por Londres cuando encontraron junto a un contenedor de la basura un antiguo espejo, decidieron recogerlo y colgarlo en su casa.
Ahora están deseando deshacerse de el ya que aseguran que desde que lo llevaron a casa han sufrido dolores extraños, han visto sombras rara y han despertados con arañazos que la noche de antes no tenían.
Lo subastan en Ebay por 155 dólares con el nombre del espejo embrujado.
