La arquitectura experimental acaba de dar un paso más hacia el futuro: arquitectos con sede en Nueva York han revelado sus planes para un rascacielos que colgaría de un asteroide a 50.000 kilómetros.
Clouds Architecture Officine, la compañía que ya ha presentado otros planes interesantes como casas de hielo en Marte, han dado a conocer sus planes para su torre Analema, un rascacielos que no sería el más alto «del mundo», sino que se encontraría suspendido de un asteroide aprovechando la órbita alrededor de la Tierra.
Según su página web, la torre utilizaría lo que ellos llaman el Sistema de Apoyo Orbital Universal (UOSS), un método de suspensión con cables de alta resistencia. Ellos sugieren que en el futuro los asteroides serán aprovechables y manipulables, siendo una construcción no tan inusual. 
De acuerdo con los diseñadores, la torre será más que un enorme rascacielos: será una especie de ciudad flotante dividida en secciones, incluyendo comercios y entretenimientos en la parte inferior, oficinas comerciales, jardines, zonas residenciales…
Incluso serían capaces de aprovechar su privilegiada posición y utilizar paneles solares para utilizar su energía, y gracias a la condensación en las nubes la lluvia podría proporcionar agua dulce.
Si esto se lleva a cabo solo el tiempo lo dirá. Existen muchas dudas en base a su construcción y funcionamiento: ¿cómo interactuaría este rascacielos y la Tierra? ¿Cómo resistiría a las condiciones climáticas externas? Pero aunque sea una idea quizá utópica, nos parece realmente interesante.
