El uso del teléfono al volante ha sustituido al alcohol en los índices de mortalidad al volante entre los jóvenes en Estados 
Unidos, unos 3.000 jóvenes mueren al año.
El estudio lo ha realizado el Cohen Children Medical Center de Nueva York, alrededor de 300.000 jóvenes acaban con heridas después de tener un accidente al volante por ir distraídos con su teléfono, frente a los 282.000 que ha causado el alcohol.
El estudio se realizo con 8.947 adolescentes de entre 15 y 18 años, de los cuales un 49% de chicos y un 45% de chicas afirmo escribir en el teléfono mientras conducía.
«La realidad es que los niños no están bebiendo siete días de la semana, se están llevando sus teléfonos y mensajes de texto siete días de la semana, por lo que se sabe que esto ocurre con más frecuencia»
