Mi perro se comió mis deberes
Aunque poca gente la ha escuchado en la vida real, la frase “mi perro se comió mis deberes” la hemos oído todos por televisión.
Es una de las mas típicas para tener una excusa ante la falta de los deberes, pues Payton Moody, un joven de 13 años no mintió cuando se lo dijo a su profesora.
El pequeño tenia que hacer un proyecto de un volcán, para su creación había usado piezas de diferentes dulces, chocolate, agua y alfileres para que todo se quedara en su sitio.
Para su desgracia el perro de la familia logró llegar hasta el proyecto e ingerirlo, tuvo que ser operado de urgencia para sacarle el chocolate (el cual es toxico para los perros) y los alfileres.