Las células madre permiten volver a caminar a dos cachorros
Científicos estadounidenses han tratado con éxito a dos cachorros con una rara condición llamada espina bífida, prometiendo un tratamiento eficaz tanto para animales como para seres humanos.
La espina bífida es una condición poco frecuente que se produce cuando la columna vertebral o la médula espinal no se desarrollan adecuadamente. Como resultado, puede obstaculizar el movimiento de las piernas e incluso causar parálisis.
En el primer tratamiento de este tipo, los científicos de la Universidad de California fueron capaces de restaurar el movimiento de las piernas de dos cachorros bulldog, llamados Darla y Spanky. Cuatro meses después de haber nacido, fueron capaces de caminar e incluso correr. «Los resultados iniciales son prometedores, ambos perros parecen haber mejorado el rango de movimiento y el control de sus extremidades», afirma el neurocirujano Beverly Sturges, director de la investigación.
Los perros que nacen con espina bífida tienen poco control sobre sus patas traseras, y por lo tanto suelen ser sacrificados. Pero estos dos son los primeros en haber sido tratados con éxito con una técnica desarrollada para ayudar a preservar la función de las extremidades a los niños con espina bífida.
Esta es una muestra más de que los tratamientos con células madres son, sin duda, el futuro de la medicina, y que como tal los gobiernos deberían de invertir en su investigación e implantación en la sanidad.