El descubrimiento se hizo en el este de la isla de Terranova. Es una extraña moneda de 520 años. Apareció en lo que fue sitio del primer asentamiento inglés en la región. Por eso, es la moneda inglesa más antigua en Canadá.
Pequeña pero importante
Se trata de una rara moneda de plata. Sí, podría ser la moneda inglesa más antigua en Canadá. Solo tiene el tamaño de una moneda de cinco centavos estadounidense. Es un poco más pequeña que una moneda de 10 peniques. Fue descubierta en el sitio histórico de Cupids Cove. Fue el primer asentamiento inglés en la nación, informa BBC News.
Se conoce como medio centavo o pieza de dos centavos de Enrique VII. Se cree que fue acuñado hace más de 520 años. Steve Crocker es ministro provincial de Turismo, Cultura, Artes y Recreación. En un comunicado comentó: «Es increíble imaginarlo. Esta moneda se acuñó en Inglaterra y se perdió en Cupids más de cien años después».
En 2001, el equipo de Gilbert descubrió un
Fue analizada por un equipo de arqueólogos. Los apoyó un excurador del Museo de la Moneda del Banco de Canadá. Así pudieron que había sido acuñada en Canterbury entre 1493 y 1499.a moneda isabelina en el mismo sitio. En ese momento se consideraba la moneda inglesa más antigua encontrada en Canadá. El medio centavo recién desenterrado se cree que puede tener unos 60 años más.
La moneda perdida
El arqueólogo jefe William Gilbert dirige las excavaciones en el sitio desde 1995. Elogió el descubrimiento como «un hallazgo importante». Dijo también:
«Algunos artefactos son importantes por lo que nos dicen sobre un sitio. Y otros son importantes porque despiertan la imaginación. Esta moneda es definitivamente una de las últimas», dijo Gilbert.
En agosto de 1610, un grupo de colonos ingleses desembarcó en lo que entonces se conocía como Cupers Cove, en Conception Bay. Los comandaba un comerciante de Bristol llamado John Guy. Los colonos construyeron allí en unos años varias estructuras, entre ellas, un fuerte, un aserradero, un molino y una cervecería. Por ese tiempo, alguien debió dejar caer una moneda… y 520 años después, la encontraron.
