La misteriosa figura del Gigante de Cerne Abbas
El Gigante de Cerne Abbas fue tallado originalmente como una imagen de Hércules. Se usaba para señalar un centro de reunión de los ejércitos sajones occidentales. Es lo que concluye una nueva investigación de la Universidad de Oxford. Así se explicaría la utilidad de la misteriosa figura del Gigante de Cerne Abbas.
Edad correcta
Este descubrimiento podría poner fin a debates de siglos sobre la función del misterioso monumento medieval. Se talló en una ladera de Dorset, en el suroeste de Reino Unido, a pocos kilómetros de Stonehenge. Resulta que no fue creado en la prehistoria, como muchos han supuesto. Tampoco a principios de la Edad Moderna, sino a principios de la Edad Media. Concretamente en el siglo IX o principios del X, cuando existía un gran interés por el héroe clásico Hércules. Lo dice un nuevo artículo publicado en la revista Speculum.
Esa nueva investigación la realizó un grupo de científicos de a Universidad de Oxford. Es probable que se hiciera para señalar un punto de reunión de los ejércitos en una finca perteneciente a un ealdorman. Era un funcionario real de alto rango de los sajones occidentales que ocuparon este territorio poco después de la caída del Imperio romano.
la misteriosa figura del Gigante de Cerne Abbas tiene unos 55 m de altura. Representa a un hombre desnudo. Está tallada en la roca caliza de una ladera sobre el pueblo de Cerne Abbas, Reino Unido.
Hércules en el fondo
«Ha quedado claro que el Gigante de Cerne no es sino el más visible de todo un conjunto de elementos altomedievales en el paisaje». Lo afirma la doctora Helen Gittos, investigadora de la Universidad de Oxford.
Eran frecuentes los ataques de los vikingos en las cercanías. Se tenía acceso a abundante agua dulce y los suministros de la hacienda local. Eso hacía este sitio «un lugar ideal para reunir ejércitos sajones occidentales con Hércules como telón de fondo». A mediados del siglo XI, el monasterio fundado a los pies del Gigante de Cerne lo había rebautizado como imagen de San Eadwold. Era un santo y una forma conveniente de borrar a Hércules. Esperaban proclamar los derechos del monasterio sobre las reliquias de los santos, destaca el estudio.