La cafeína estimula a los abejorros
No hay nada para despertar como un café. Y no solamente nosotros, los humanos, lo percibimos. Por lo menos, es lo que dice este estudio. La cafeína estimula a los abejorros y los hace más eficientes. Pueden polinizar mejor sus plantaciones.
Ayudantes polinizadores
La población de animales polinizadores disminuye con el cambio climático. Abejas, polillas, avispas, mariposas, escarabajos, aves… es significativo. Influye la pérdida de sus hábitats y del uso de pesticidas. Esto hizo que diversos productores de frutas pensaran en otra solución. Como los «polinizadores controlados». Por ejemplo, las colonias comerciales de abejorros, que polinizan sus cultivos.
Estos ayudantes, sin embargo, no son tan eficientes. Algunos de estos insectos casi nunca abandonan su nido. Otros se distraen fácilmente con otras plantas en los alrededores y no polinizan el cultivo.
La nueva investigación buscaba saber si la cafeína estimula a los abejorros a polinizar. Tal vez podrían ser entrenados para tener preferencia por determinadas plantas. Se desarrolló una mezcla líquida de cafeína, azúcar y el olor específico de la «flor objetivo». El preparado se asperjó en la colmena de los pequeños animales.
Bien entrenados
«Veríamos si los abejorros iban por todas las flores por igual. O si optarían por las flores que huelen como las que les han enseñado en el nido». Es lo que explicó Sarah Arnold, autora del estudio.
Después de «entrenar» a los insectos con la mezcla, los científicos liberaron a los animales en el laboratorio. Había flores robóticas tanto con el olor de la «flor objetivo», como otras. Todas contenían el mismo néctar dulce. Se observó a los abejorros que se habían entrenado usando la mezcla de cafeína. Estos se interesaron mucho más en las plantas objetivo. Y había un efecto sutil sobre la velocidad de trabajo de los abejorros. Visitaban más flores que lo usual, detalló Science Daily. ¿Qué implica esto? Que la cafeína también puede mejorar las habilidades de aprendizaje motor.
La investigación se publicó el 28 de julio en la revista científica Current Biology.