Gemma Long es la mujer que tiene que comer mínimo 3.500 calorías para no morir
Esta mujer inglesa se sometió a una operación de baipás gástrico, que es una especie de reducción de estómago, su objetivo era el de adelgazar ya que después de dar a luz a su hijo alcanzó los 120 kg.
Ahora ha conseguido perder 70 de esos kilos pero su vida es un auténtico infierno.
Actualmente pesa 50 kilos y el cambio tan grande de peso ha debilitado tanto su organismo que se ve obligada a comer 3.500 calorías al día para no tener peligro de muerte.
“Pensé que la operación sería la respuesta a todos mis problemas, pero no pensé que me cambiaría de esta manera. Si dejo de comer altas cantidades de calorías y alimentos grasientos mi peso se desploma. A pesar de que pueda sonar bien, la enorme cantidad de comida me hace sentir mal, me siento constantemente enferma y agotada”.
Aparte de la gran ingestión de comida también debe tomar 10 tipos distintos de vitaminas al día, “Me siento destruida todo el tiempo y ni siquiera puedo ir a por mis hijos al colegio, por ellos me operé y ahora no tengo energías para cuidar de ellos.”