En Los Ángeles nada es lo que parece, y para tener éxito o por lo menos aparentarlo lo mejor es llevar detrás un grupo de personas que te hacen preguntas sobre tu vida privada y te hacen fotos.
Ya no es necesario ser famoso para que de verdad ocurra esto, solo tienes que tener 5.000 dólares para que te reciban en el aeropuerto o 10.000 para que te persigan por la calle.
Adam Swart, fundador de esta curiosa empresa asegura que entre sus clientes habituales se encuentran actores de cine, televisión etc.
“Por ejemplo, tuvimos un cliente que tenía un almuerzo con un agente importante y quería hacerle creer que era más famoso de lo que era realmente”
Hay un mínimo de 5 y un máximo de 100 de «fans» que en realidad son actores, para contratar.
