En 1981 un perro fue elegido alcalde de una pequeña ciudad californiana
En 1981 Bosco Ramos, de mezcla labrador y rottweiler, derrotó a sus dos contrincantes humanos en las elecciones a alcalde de la localidad de Sunol, California. El alcalde Ramos estuvo en el cargo durante trece años, hasta su muerte. Fue entrevistado en televisión, apareció en concursos y en noticias que fueron polémicas para el régimen comunista chino.
La idea de votar a Bosco como alcalde surgió como una broma entre unos amigos. Encabezó el desfile de Halloween y asistió a numerosos eventos sociales vestido en un esmoquin a medida. Fue criticado en China por un diario que le mostró como ejemplo de que las elecciones democráticas no funcionan.