El niño que halló un fósil en su jardín
A veces se encuentran cosas curiosas en el jardín trasero. Una moneda algo oxidada, un botón perdido… no es tan inusual. ¿Y qué tal encontrar un fósil del tiempo de la Pangea? ¿No lo crees? Pues sí, es lo que le pasó a Siddak Singh Jhamat. Es originario de la ciudad de Walsall (Reino Unido). Es el niño que halló un fósil en su jardín, uno de varios millones de años. Lo hizo mientras buscaba gusanos.
Regalo preciso
Para Navidad, el niño había recibido como regalo un equipo para buscar fósiles. Eso le animó a excavar. «Estaba cavando solo en busca de gusanos y cosas como cerámica y ladrillos. Y encontré esta roca que se parecía un poco a un cuerno. Entonces pensé que podría ser un diente o una garra o un cuerno. Pero en realidad era una parte de coral que se llama coral cuerno», explica Siddak Singh, de 6 años. Es citado por medios británicos. «Estaba muy emocionado por lo que era en realidad», añade.
«Nos sorprendió que encontrara algo de forma tan extraña en el suelo. Halló un coral cuerno, y algunas piezas más pequeñas cerca. Luego, al día siguiente, volvió a cavar y encontró un bloque de arena congelado», explica el padre de Sid, Vish Singh. Dentro había un montón de pequeños moluscos y conchas marinas. También, «algo llamado crinoideo, que es como un tentáculo de calamar. Por lo que es una cosa bastante prehistórica», concluye.
El hombre pudo identificar el coral cuerno gracias a un grupo especializado en fósiles en Facebook. Cayó en la cuenta de que era probable que fuese un coral rugoso. Su edad estimada oscila entre los 251 y los 488 millones de años. El Reino Unido en aquel momento era parte de Pangea, el gran supercontinente. Inglaterra estuvo bajo el agua durante bastante tiempo, detalla Singh.
Caso único
La zona donde vive la familia no es rica en fósiles. En cambio, sí lo es la Costa Jurásica, al sur del Reino Unido. Pero la familia tiene mucha arcilla natural en el jardín donde el niño localizó el objeto.
La familia incluso piensa contactar con el Museo de Geología de la Universidad de Birmingham a raíz del inesperado hallazgo.
«Mucha gente comenta lo increíble que es encontrar algo en el jardín trasero», comenta el padre de Sid. «Es posible encontrar fósiles en cualquier lugar si buscas con suficiente atención. Pero descubrir una pieza tan grande como esta es algo bastante único», señala. El niño que halló un fósil en su jardín realmente tiene futuro como paleontólogo.