Hace unos pocos años, Virginia Badler junto a un grupo de investigadores revelaron la existencia de una cosecha de vino de hace 5.500 años. Estas investigaciones se llevaron a cabo sobre los restos de la base de una jarra de época sumeria, en Irán, en el año 1973. La expedición en la que se hallaron estos restos estaba dirigida por el Royal Ontario Museum de Toronto, Canadá.
Desde hacía muchos años la jarra estaba almacenada en el museo hasta que Virginia Badler, estudiante de la Universidad de Toronto, comenzó un análisis en profundidad de la jarra, pues tenía relación con la tesis doctoral que estaba realizando. Esta joven estudiante demostró que una gran manca roja mostraba la presencia de ácido tartárico, un elemento químico que en la naturaleza se encuentra fundamentalmente en las uvas.
¿Que sabor tendría este vino tan añejo?
