Descubren una gigantesca estatua de Ramsés II en un barrio pobre de El Cairo
Casi 3.000 años después de su reinado, se ha descubierto en El Cairo una gigantesca roca del Faraón Ramsés II. La escultura, de cuarcita, y de ocho metros de altura, fue enterrada boca abajo en lo que es un actual barrio de El Cairo suburbano; dicho descubrimiento se ha realizado esta semana, cerca de donde se levantó un templo solar fundado por Ramsés II. Ahora, el área es un barrio pobre de la clase obrera, conocida como Matariya.
Equipos de arqueólogos alemanes y egipcios desenterraron la estatua gracias a una excavadora mecánica, mientras que los equipos de noticias seguían el descubrimiento en directo. Aunque no han descubierto ninguna inscripción para identificar la gran estatua de roca, creen que el lugar, cerca del templo del sol de Ramsés II, es una pista bastante fuerte como para que la estatua sea una representación de Ozymandias, el rey de reyes.
«Primero encontramos el busto de la estatua y la parte inferior de la cabeza, y ahora hemos sacado la cabeza y hemos encontrado en ella parte de una corona, la oreja derecha y un fragmento del ojo del mismo lado», afirma Khaled al-Anani, ministro egipcio, y que ha catalogado el descubrimiento de «muy importante».
Ramsés II fue el tercer faraón de la XIX Dinastía egipcia; temido líder, reinó en el país africano entre 1279 y 1213 a.C.; aunque existe cierta discordia entre los historiadores y o hay evidencias físicas reales, muchos creen que podría ser el faraón que esclavizó a los israelitas.