Dado que la agricultura representa el 70% del consumo mundial de agua, cualquier oportunidad que tenemos de mejorar la vida de los 4 mil millones de personas en todo el mundo que viven con grave escasez de agua durante al menos un mes al año, dependerá de la capacidad de adaptar la agricultura y los hábitos de consumo. Como un primer paso hacia dicho objetivo, Oxfam acaba de publicar un informe que indica que el arroz y el trigo consumen más agua que el resto de los cultivos del mundo. Juntos.
Como los gráficos y la infografía a continuación indican, la producción de estos dos productos alimenticios consumen una enorme proporción de todo el uso mundial del agua. El arroz, por ejemplo, utiliza hasta un 40% de toda el agua de riego en todo el mundo.
Obviamente, esto ocurre porque el arroz y el trigo son los cultivos más comunes en todo el mundo, y por lo tanto proporcionan una rentabilidad significativa por el uso de agua, más que cualquier otro tipo de alimento.
Sin embargo, según el informe, el arroz y el trigo son los dos productos cultivados en agua que requieren la máxima hidratación por tonelada. Debido a esto, los autores del informe instan a los agricultores y científicos de todo el mundo que desarrollen técnicas de producción más eficientes, al mismo tiempo que creen cepas que sean más resistentes a las sequías.
Por ejemplo, el Sistema de Intensificación de Arroz (SRI) aumenta la productividad mediante el uso de ciertos tipos de suelo y nutrientes, permitiendo a los agricultores producir más arroz con menos agua.
Pero hay malas noticias para los amantes de los cereales, y es que el arroz y el trigo también emiten gases de efecto invernadero. Los arrozales inundados, por ejemplo, liberan grandes cantidades de metano, y contribuyen con el 1,5% de la emisiones globales de este tipo. Afortunadamente, un estudio realizado en Corea encontró que la práctica del Sistema de Intensificación de Arroz reduce las emisiones de metano en hasta un 72,8%.
