Condenado por agujerear un condón
Se llama Craig Jaret Hutchinson y el decidir agujerear los preservativos para que su pareja quedara embarazada no ha sido la mejor decisión que ha tomado.
La Corte Suprema de Canadá ha ratificado la condena que tenía impuesta este joven por “asalto sexual” al pinchar los preservativos con un alfiler para que su novia quedara embarazada y no rompiera la relación.
Al quedar la mujer embarazada, Hutchinson le confesó que había perforado deliberadamente los preservativos, por lo que la mujer le denunció y decidió abortar, hecho que le produjo una infección uterina que requirió tratamiento con antibióticos.
El caso ha sido muy controvertido ya que desde el principio se planteó el interrogante de si el engaño en la contracepción podría o no equivaler a un ataque sexual.
En diciembre de 2011, Hutchinson fue condenado a 18 meses de prisión, sentencia que recurrió. A principios de 2013, la Corte Suprema de Nueva Escocia rechazó su apelación basada en que se trataba en una sentencia excesiva y que la mujer había tenido relaciones sexuales consensuadas con él. Finalmente, el Tribunal Supremo de Canadá ha indicado por unanimidad que “el sabotaje de los condones por parte del acusado constituye un fraude» ya que no recibió el consentimiento de su entonces novia para agujerearlos.
Para la Corte Suprema de Justicia de Canadá, perforar deliberadamente un preservativo con el fin de que la mujer quede embarazada contra su voluntad constituye una agresión sexual aunque la relación íntima haya sido consentida.
«La demandante no había dado su consentimiento para tales actos (copular con el fin de procrear) por lo cual no otorgó su acuerdo para la actividad sexual en cuestión», ratificaban los magistrados.