Hay una serie de inventos en los que hoy por hoy no recaemos con interés pero es cierto que sin ellos nuestras vidas cambiarían. Cinco cosas a las que no damos importancia pero usamos 
muy a menudo.
Hemos hecho una selección de cinco inventos muy populares, aunque evidente existen muchísimos más, y hemos querido prescindir de los inventos tecnológicos que obviamente nos han hecho cambiar de época, pero a los cuales sí valoramos.
El primer invento es la aspirina, creada por Felix Hoffmann que registró su patente en 1897 a nombre de Bayer. Todos conocemos su composición, el ácido acetisalicílico, al años se consumen miles de millones de estas pastillitas, pero está claro que no todas pertenecen a Bayer.
El siguiente invento es el bolígrafo Bic, lo complicado que debía ser todo cuando se escribía con pluma, también existían las máquinas de escribir, pero eran caras y problemáticas. Hasta que en 1953 Marcel Bich patentó el bolígrafo bic que realmente era de dos hermanos húngaros: Laszlo y Georg Biro.
En 1924 salió a la venta nuestro siguiente invento, el Kleenex, pertenecía a la compañía americana Kimberly Clark, lo cierto es que primero fue vendido como un desmaquillador, aunque en 1930 un estudio averiguó que la mayoría de los clientes usaban el papel de usar y tirar para sonarse los mocos.
El siglo XX es el siglo de la mujer, por eso la empresa Tambrands, creó el Tampax en 1936, aunque nos dio su golpe fuerte hasta la década de los 60.
Por último he de terminar con un invento que ha formado parte de la vida de todos, el Cola Cao, durante la durísima posguerra española, en 1946 se creó el Cola Cao, y alcanzó su máximo esplendor a través de una cuña radiofónica donde sonaba la canción conocida por todos “Es el Cola Cao desayuno y merienda…” Fue creado por Ignacio Ferrero y José M. Ventura, y hoy es exportado a todo el mundo.
