¿Qué puede ser más romántico que navegar por los canales de Venecia? Es uno de los destinos turísticos más reconocibles del mundo. Su centro histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Se construyó en un conjunto de islas sobre una laguna. Y sin embargo, parece inevitable que suceda lo peor: Venecia se hunde. Hay un polémico proyecto que podría salvarla, y se llama Mose.
Mose es un proyecto faraónico de infraestructura. Involucra un enorme financiamiento público e ingeniería compleja y está destinado a aislar Venecia del mar Adriático en caso de mareas superiores a 110 centímetros.
Las obras empezaron en 2003, pero se han visto afectadas por continuos retrasos. Escándalos de corrupción también complicaron su ejecución.
La barrera que inspiró el bíblico Moisés
Mose es un acrónimo de Modulo Sperimentale Elettromeccanico (Módulo Electromecánico Experimental). Se refiere a la figura bíblica de Moisés, quien separó el mar Rojo para permitir que los israelitas huyeran a Egipto.
Venecia se hunde lentamente, y una de las peores inundaciones en su historia fue en 1966. Luego de eso el gobierno italiano pidió a los ingenieros que elaboraran planes para construir una barrera en el mar.
La construcción no empezó hasta 2003 y debía finalizar en 2011, pero el proyecto se ha visto afectado por los retrasos prolongados, los sobrecostos y la corrupción. El proyecto consta de 78 barreras móviles de color amarillo enterradas en el agua. Cuando se activan, se elevan por encima de la superficie. Así evitan que la marea del Adriático inunde la laguna veneciana.
«Si Mose hubiera estado en funcionamiento, habríamos evitado esta marea alta excepcional», dijo el alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro. Se manifestó después de las inundaciones del martes, cuando el nivel del agua alcanzó los 187 cm.
Solo una vez desde que se tiene registro, en 1966, alcanzó una altura mayor: 194 cm.
Las 78 compuertas ya están ancladas a una construcción de hormigón en el fondo de la laguna y los ingenieros están trabajando ahora en la mecánica para elevarlas simultáneamente una vez que se pronostiquen mareas de más de 110 cm.
Una reciente prueba en parte de la barrera causó vibraciones preocupantes y los ingenieros descubrieron que algunas de las piezas sumergidas se habían oxidado.
Se esperan nuevos ensayos el próximo año.
Como siempre, la corrupción, mientras Venecia se hunde
Más allá de las críticas ambientales y por el sobrecosto, el proyecto se vio envuelto en un escándalo de corrupción.
En 2014, el entonces alcalde de Venecia Giorgio Orsoni y decenas de funcionarios y empresarios de la ciudad fueron detenidos. Se les condenó por sobornos durante su proceso de licitación pública. Malversaron cerca de US$27 millones en fondos públicos destinados a las barreras.
Por el momento, el gobierno de Italia decretó el estado de emergencia en la ciudad. Se aprobó la primera fase de indemnizaciones, en la que se desembolsarán US$22 millones.
La atención se centra en los daños que haya podido sufrir la basílica de San Marcos. Su cripta quedó completamente anegada. Se empaparon los sarcófagos de los patriarcas y los mármoles y mosaicos que la decoran.
Más allá de la posibilidad de ejecutar este proyecto, no solo los venecianos esperan que se alcance una solución. El mundo entero venera a Venecia. Nadie quisiera que, en el futuro, la única forma de visitar sus basílicas, sus puentes y caminos, sea… en traje de buzo.
