Son mundialmente célebres las misteriosas líneas de Nasca. Al sur del Perú, este grupo de geoglifos precolombinos se extienden a lo largo del desierto. Las teorías que explican su origen son múltiples. Se les ha considerado desde calendario astronómico hasta homenaje a visitantes de otro planeta. Lo cierto es que nadie sabe a ciencia cierta qué buscaban los antiguos habitantes de Nasca con sus inextricables y bellos dibujos sobre el desierto. Este escenario se vuelve aún más misterioso e interesante gracias a nuevos geoglifos hallados en Nasca.
143 nuevos geoglifos
Arqueólogos de una universidad de Japón anunciaron el descubrimiento de al menos 143 geoglifos. Los integrantes de la universidad de Yamagata sostuvieron que los descubrimientos representan a “personas, animales y otros seres”. Se estima que son anteriores a las Líneas de Nasca.
El científico Masato Sakai y su equipo vienen trabajando hace 15 años en la zona con drones. Sin embargo, el último geoglifo encontrado entre 2018 y 2019 fue gracias a la inteligencia artificial. Esto se logró a través de un convenio con la compañía estadounidense IBM.
Los especialistas también mencionan que hay muchos más grabados que deben ser descubiertos. Sin embargo, el proceso se ha vuelto más complejo.
El motivo principal es que estas líneas han sido dañadas por carreteras e inundaciones.
¿Quiénes las hicieron?
Por otro lado, el profesor experto en arqueología de la Pontificia Universidad Católica, Luis Jaime Castillo, manifestó que los nuevos geoglifos hallados en Nasca son un descubrimiento “muy importante”. Demuestra que aparte de las Líneas de Nasca también habían «otras más pequeñas producidas probablemente por individuos y familias”.
El exministro de Cultura dijo que en este caso las figuras descubiertas son mucho más pequeñas a las de Nasca. Señaló que su temática es “predominantemente antropocéntrica”.
Las Líneas de Nasca se encuentran reconocidas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
Nunca sabremos con certeza qué pretendieron los antiguos nascas que dibujaban en el desierto estas gigantescas figuras. Sin embargo, nunca dejarán de maravillarnos.
