Los primeros helados eran de nieve
Una sustancia cremosa y fría con trozos de fruta enamoró a Carlos II en mayo de 1671. Fue en un banquete en el que el helado se sirvió por primera vez en Inglaterra, aunque no en otras partes del mundo.
La historia cuenta que el helado, típico de tierras italianas, fue llevado hasta allí por Marco Polo desde China en el siglo XIII. Desde el siglo VIII a.C. los chinos habían descubierto la manera de hacer helados con nieve natural mezclándolos con zumo de fruta, por lo que los primeros helados datan de 1660.
En Europa se construyeron grandes neveras para almacenar el hielo durante el invierno y comer helados durante el verano. Estas neveras existieron hasta que se descubrió la forma de crear hielo, algo que hay que agradecer a los árabes.
Hasta 1690 no comenzaron a fabricarse a base de leche, nata y frutas, y posteriormente descubrieron que mezclándolo con huevo, obtenían una masa más sabrosa y suave.