Llegó al poder tras unificar a las tribus nómadas del noreste de Asia. Fundó el imperio Mongol e invadió otras tribus, terminando por conquistar buena parte de Eurasia. Sus conquistas y política eran tan sangrientas, que se estima que acabó con la vida del 11,1% de la población mundial de la época. En números redondos, se calcula que las campañas de conquista causaron la muerte de 40 millones de personas.
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