El dedo medio se volvió una ofensa en el siglo cuarto antes de Cristo (A.C.) en Atenas, por el filósofo Diógenes
Una vez, un intelectual muy conocido, expresando su desagrado por un político charlatán, elevó su dedo medio y declaró: “Éste es un gran demagogo”.
El episodio no ocurrió en un programa televisivo ni en un salón de Londres o Nueva York, sino en el siglo cuarto antes de Cristo (A.C.) en Atenas, cuando el filósofo Diógenes les explicaba a un grupo de visitantes cuál era su opinión sobre el orador Demóstenes, según lo relata un historiador griego.
Este es el primer registro de que el dedo medio extendido, con los otros dedos cerrados debajo del pulgar, ha expresado ofensa y desprecio por más de dos mil años.