Patos de goma, cortinas de baño y comida rápida podrían estar afectando la libido de las mujeres por el efecto de un producto químico llamado ftalato, que se utiliza para dar un tacto suave a los plásticos.
Según un estudio reciente, las mujeres con las mayores concentraciones de ftalatos en sus cuerpos son mucho más propensas a sufrir disminución de la libido.
«Los ftalatos son productos químicos que están en los plásticos y básicamente hacen el plástico suave,» dijo el Dr. Emily Barrett, de la Universidad de Rochester, Facultad de Medicina, en Nueva York.
«Así que si usted piensa en la suavidad y flexibilidad de un pato de goma o una cortina impermeable de ducha probablemente son los ftalatos los que les dan esa flexibilidad.»
«Estamos aprendiendo que los ftalatos son disruptores endocrinos, que interfieren con las hormonas normales en el cuerpo – la testosterona y parece que el estrógeno también.»
«Y sabemos que tanto la testosterona como los estrógenos son realmente importantes para muchas cosas, incluyendo la libido, así que estábamos interesados en ver si las mujeres que tenían los niveles más altos de estos productos químicos en sus cuerpos tienen una falta de libido.»
El Dr. Barrett midió los niveles de ftalatos en la orina de 360 mujeres embarazadas de entre 20 y 30 años y les preguntó la frecuencia con la que perdieron la libido en los meses previos a su embarazo.
Las que tenían más ftalatos en su orina tenían más del doble de probabilidad de tener la libido baja.
Los ftalatos no están unidos químicamente a los plásticos a los que se añaden, por lo que se liberan de forma continua en el aire, en los alimentos y en los líquidos.
«Es interesante porque se trata de sustancias químicas a las que todos estamos expuestos todos los días», añadió el Dr. Barrett.
«Están en todo nuestro entorno y cada una de las personas estudiadas mostraron niveles medibles de estos productos químicos.»
«Una de las recomendaciones que se pueden hacer para reducir su exposición potencialmente es comer menos alimentos procesados y comer más cosas frescas y sin embalaje.»
«Los alimentos orgánicos son tal vez mejor, porque los ftalatos se utilizan a veces en los pesticidas, pero nunca van a ser capaces de eliminar totalmente los ftalatos de su vida a menos que los políticos cambien esta situación.»
