Sarampión y tos ferina: nuevos brotes preocupan en Europa
Sarampión y tos ferina son dos enfermedades infecciosas que históricamente son objeto de preocupación y atención en el ámbito de la salud pública. Esto se debe a su capacidad para causar brotes significativos y, en algunos casos, complicaciones graves. Actualmente, rebrotes de estas enfermedades preocupan en el continente.
Nuevos brotes de sarampión y tos ferina preocupan en Europa
El reciente aumento de casos de tos ferina en Guadalajara y Lleida, junto con el resurgimiento del sarampión en varias naciones europeas, subraya la importancia crucial de mantener en los niños el plan de vacunación actualizado, según la Asociación Española de Vacunología (AEV).
Aunque la situación en España no es alarmante, en 2023 se reportaron 1,942 casos de tos ferina en el país. A su vez, el sarampión está bajo control en España. Hasta ahora, registraron quince casos en el país: siete importados y ocho autóctonos.
Según el informe anual del Centro Nacional de Epidemiología, en 2023 hubo 11 casos, todos importados o relacionados con contactos cercanos. Aunque existe un cambio de tendencia, la situación actual no parece grave y está lejos de lo que está sucediendo en otros países como el Reino Unido y Rumanía, donde hay brotes en las áreas que falta vacunación.
Tos Ferina
La tos ferina, también conocida como tos convulsiva, es una infección bacteriana altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis. Afecta principalmente a las vías respiratorias y se caracteriza por episodios prolongados de tos violenta. Los mismos, a menudo, están acompañados de un sonido agudo al inhalar.
Los síntomas de esta enfermedad, generalmente comienzan de manera similar a un resfriado común, con congestión nasal, estornudos y tos leve. Sin embargo, a medida que el proceso avanza, la tos se vuelve más grave.
Incluso, puede ser lo suficientemente intensa como para causar vómitos, dificultad para respirar como también convulsiones. En lactantes y niños pequeños, la tos ferina puede ser especialmente peligrosa, ya que puede provocar complicaciones graves, como neumonía, convulsiones, daño cerebral e incluso la muerte.
La vacunación es fundamental para prevenirla. Generalmente, se administra en combinación con vacunas contra otras enfermedades, como el tétanos y la difteria.
Sarampión
El sarampión es otra enfermedad altamente contagiosa causada por el virus del sarampión (MV). También es una enfermedad prevenible mediante vacunación, pero sigue siendo un problema en muchas partes del mundo.
En este caso, los síntomas incluyen fiebre, tos, secreción nasal, ojos rojos y llorosos, y una erupción característica que comienza en la cara y se extiende al resto del cuerpo. Aunque la mayoría de las personas se recuperan completamente del sarampión, es una enfermedad que puede provocar complicaciones graves, como neumonía, encefalitis (inflamación del cerebro), ceguera y, en casos extremos, la muerte.
La vacuna contra el sarampión, generalmente administrada como parte de la vacuna triple vírica (sarampión, paperas y rubéola), es altamente efectiva para prevenir la enfermedad. Sin embargo, para lograr la inmunidad colectiva y prevenir brotes, es crucial que una gran proporción de la población esté vacunada.
Tanto la tos ferina como el sarampión son enfermedades infecciosas graves que pueden prevenirse en gran medida mediante la vacunación. El mantenimiento de altas tasas de vacunación y la conciencia pública sobre la importancia de las mismas son fundamentales para controlar la propagación de estas enfermedades y proteger la salud de la comunidad en general.